sábado, 27 de diciembre de 2008

Rodolfo Franco en el diario LA NACION de Buenos Aires


Rodolfo Franco en el diario LA NACION

LA NACION- Domingo 27 de junio de 1954

Dejó de existir Ayer el Pintor Rodolfo Franco

Hondo sentimiento de pesar suscita en los círculos artísticos y docentes el fallecimiento del pintor Rodolfo Franco, que acreditó en su fructífera existencia relevantes condiciones en la pintura, el grabado y la escenografía.
Nació el destacado artista en esta capital el 15 de febrero de 1890, demostrando desde muy temprana edad su decidida vocación. A los 20 años se trasladó a Europa, donde profundizó sus estudios en la Academia Vitti, de parís, y con el grabador Edouard Léon. Más tarde en España, estudió con Anglada Camarasa , de quien aprendió la sutileza de las gamas y la conjugación de los tonos. Viajó, después a España, encontrando en Sevilla y Mallorca frescos motivos para su inspiración. De regreso al país, pueso sus íntimos conocimientos de la materia plástica al servicio de un arte nacional: se adentró en el espíritu norteño y lo describió sagazmente en “Feria en el valle”, “Procesión” y “Abra Pampa”. Su obra fue estimada, y en 1922 su tela “Renovales” fue premiada en el Salón Nacional y en el Municipal. Participó además en numerosas exposiciones colectivas y presentó algunas individuales, destacándose como consumado colorista. Supo, además, infundir al mismo tiempo a sus telas un sentido lírico, que a veces adquirió el multiforme resplandor del esmalte. Sus cuadros “Eulalia” y “San Hermenegildo”, adquiridos por el Museo Nacional de Bellas Ares, lo mismo que “Femme en blue”, “después de la nevada” y “Feria rusa”, se singularizan por su riqueza de color y por su acentuada expresión. Su serie de aguafuertes sobre motivos sevillanos fue extensamente comentada en España, sobre todo por el vigor interpretativo de “El garrotín”, “Parador de los amoladores” y “Patio de Triana”.
En la docencia, desde sus cátedras en la Escuela de Artes Decorativas y de la Escuela Superior de Bellas Artes, alentó la vocación de numerosos artistas jóvenes, y desde la dirección escenográfica del teatro Colón cumplió una intensa labor, fundando el taller de escenografía de nuestro primer coliseo, que dirigió desde 1925 hasta 1931. Entre sus trabajos de este carácter se recuerdan “tabaré”. “Ollantay”, “Petruschka”, “El amor brujo”, “Sadko” y “Flor de Irupé”, así como también el de “Tristán e Isolda”, que efectuara para el teatro Municipal de Río de Janeiro. Fue también, durante muchos años, director escenógrafo del teatro Odeón, y contribuyó al éxito de los más celebrados conjuntos extranjeros que ocuparon ese escenario.
Entre sus pinturas murales deben citarse, igualmente, las que realizó para los Ferrocarriles del Estado, el subterráneo Chadopyf y el pabellón argentino de la Exposición de París.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias. Buscaba información sobre Rodolfo Franco y encontré esta página. ¿saben dónde puedo encontrar más info?Dana